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La
muestra recorre con una mirada abierta la presencia del
cinetismo a lo
largo de un siglo, deteniéndose en determinados
momentos de la vanguardia internacional como el Futurismo,
el Dadaísmo, el Surrealismo, etc, con ejemplos
tan destacados como Marcel Duchamp, Giacomo
Balla, Salvador Dalí o
Naum Gabo. El grupo argentino Madi puede
ser considerado también desde esta perspectiva.
La incorporación
de artistas no estudiados técnicamente como cinéticos,
se justifica en las bases históricas que sentaron
para lo que luego será el cinetismo asumido como
una corriente artística. Se recogen también
obras de jóvenes artistas estrictamente contemporáneos
como Felicidad Moreno, Rebecca
Horn o Keiji Kawhasima que
de alguna forma renuevan el lenguaje del movimiento como
recurso plástico en la obra de arte. La exposición
se detiene en los sesenta parisinos en un grupo de artistas,
muchos de ellos latinoamericanos, como Jesús
Rafael Soto o Carlos
Cruz-Díez, que se agruparon en torno
a la galería de Denise René y
que asentaron la base programática del arte cinético
como una corriente que busca la expresión de movimiento
en la creación plástica, ya sea de forma
virtual o real. |
